Viajar sola hoy en día no sólo es una opción, si no que se ha convertido en un hábito de vida para muchas de nosotras. Es importante por un lado saber a dónde ir o qué ruta haremos; ya que eso nos permite tener ciertas referencias de antemano, como hábitos culturales, dónde comer, dormir, etc.
También depende del tipo de viaje que queremos emprender; no es lo mismo hacer un safari en Kenia que alojarse en un bungalow en Asturias, en una villa privada en plena vegetación Tailandesa que hacer turismo shopping en Milán o de arte en Florencia. Todas estas rutas son muy diferentes aunque todas están muy bien y en cada una de ellas se descubre en nosotras una mujer diferente a la que dar rienda suelta y visionar otros horizontes. Los viajes geográficos le ponen pies y movimiento a nuestra libertad mental, a nuestras ansias de abrir una puerta y ver qué hay detrás para explorar...y explorarnos.
Un viaje en solitario bien pensado y utilizando nuestros recursos de la mejor manera, puede ser una experiencia tan intensa como enriquecedora, puede marcar un antes y un después en nuestra vida y el concepto que tenemos de ella.
También depende del tipo de viaje que queremos emprender; no es lo mismo hacer un safari en Kenia que alojarse en un bungalow en Asturias, en una villa privada en plena vegetación Tailandesa que hacer turismo shopping en Milán o de arte en Florencia. Todas estas rutas son muy diferentes aunque todas están muy bien y en cada una de ellas se descubre en nosotras una mujer diferente a la que dar rienda suelta y visionar otros horizontes. Los viajes geográficos le ponen pies y movimiento a nuestra libertad mental, a nuestras ansias de abrir una puerta y ver qué hay detrás para explorar...y explorarnos.
Un viaje en solitario bien pensado y utilizando nuestros recursos de la mejor manera, puede ser una experiencia tan intensa como enriquecedora, puede marcar un antes y un después en nuestra vida y el concepto que tenemos de ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario